COLIBRÍ

Colibri

 

El cuarto reproductor de destacada actuación, es el potro Colibrí. Hijo de Guarapo y Nación. Es un imbriding Gacho, que se reprodujo en poder de don Ángel Caballero. No dejó gran descendencia por no contar el criadero con un número adecuado de yeguas. Tiene un valor mayor, por lo tanto, la actuación de sus descendientes por ser tan reducidos.

         Se puede apreciar, en la sangre del potro Colibrí, una gran consanguinidad del Gacho, al ser Guarapo padre y abuelo materno.

         Tenemos además que la yegua Sardina, madre de Viela es doble Codicia. Esta yegua es abuela materna del potro Flotador y éste, nieto de Gacho. Señalo esta referencia pues entre los caballos Colibrí y Salteador existe un gran parecido. En primer lugar, las cabezas son casi similares, con mucho de árabe, y el temperamento es muy parecido, siendo mas dócil Salteador.

     Los caballos Colibrí son extremadamente atajadores, pero de no muy buena boca, por lo que hay que conducirlos con sumo cuidado. Hago esta afirmación pues he tenido la suerte de poseer varios de estos productos.

     De estos actuaron en Rancagua Naranjerita, Abandono, Jalea Real, Nunca en Domingo, Timbalero.

 

      Talca                                                               Osorno

Naranjerita                                                         Campo Bueno

Campo Bueno                                                   Buen Amigo

                                                                         Alazán del Chico

 

Estos caballos, si bien en número son casi igual a la de los otros, no han tenido una actuación tan descollante como los anteriores.

Colibri

El reproductor Colín Nunca en Domingo, hijo de Colibrí y de gran influencia en los caballos actuales Nunca en domingo

 

 

                                                           AUNQUE SEA A GRANDES RASGOS

 

Hecha, aunque sea a grandes rasgos, una reseña general de los cuatro reproductores que han aportado un mayor número de finalistas de los últimos Campeonatos Nacionales, vemos, como una coincidencia, que en todos hay consanguinidad dentro de sus propias sangres. Incluso entre Salteador y Colibrí existe un parentesco cercano por la parte materna. Todo eso hace, como señalé anteriormente, que se expliquen grandes parecidos, tanto en ss condiciones físicas como de temperamento.

Resalta que los hijos de Quillacón II y Refuerzo son de mas sello que los otros dos.

  Creo importante destacar, sin embargo, que en los casos de Refuerzo y de Quillacón II, todos sus hijos han sido trabajados y corridos por maestros de la talla de Ruperto Valderrama y Santiago Urrutia. Los primeros trabajados por el mismo y  los de Quillacón II por el gran arreglador que es Segundo Tamayo, hombre muy modesto y por eso, poco conocido.

  Los Salteador y Colibrí han pasado por diferentes manos, pero en ningún caso, de jinetes de prestigio y calidad de los anteriormente señalados.

  En cuanto al número de hijos, me parece que la delantera corresponde a Salteador. Desgraciadamente para nosotros los corraleros, solo uno de estos reproductores queda vivo, y el potro Salteador, que cuenta con 31 años de edad, está en poder de don Fernando Hurtado.

    Para continuar con estas líneas debemos buscar entre sus hijos los más de sangre y categoría. Así como es importante el padre, lo es también en igual forma la madre. Tenemos tres reproductores nombrados anteriormente, de gran actuación, e hijos de grandes yeguas.

 

Barranco : Mentita

Cachupín: Tula

Chamanto : Chiporra

Nunca en Domingo

Farolito : Pelotilla.

 

Vale la pena agregar, que las palabras de Don Samuel, después de mas de 40 años, aún nos hacen sentido…