En el mundo hay dos grandes escuelas de equitación, la Brida y la Gineta. Mientras que la Brida se ha expandido a lo largo del mundo, la Gineta es la escuela que ha influenciado al Rodeo Chileno. La Gineta de España es un libro que se escribió en 1599, más de 400 años atrás y su conocimiento y utilidad trasciende toda época, lo escribió Pedro Fernández de Andrada y es valioso hasta el día de hoy.
En el prólogo dice “ En el cual trata la naturaleza del caballo, y de sus hechos, y hazañas, y el modo de hacer las castas y criar los potros, y como se han de enfrenar y castigar los caballos. Y muestrase por arte a los hombres, como lo han de hacer, y como los caballeros mozos se han de poner a caballo guardando el orden antiguo de la gineta de España. Y últimamente se trata, como se ha de pensar, regalar y engordar a los caballos”.
Es un libro de tremenda utilidad que espero les sirva y lo he visto en internet escaneado desde el español antiguo. Sirve mucho e inspira a ver al caballo y su enseñanza como una forma de vida, una tradición, un arte y una pasión. Deja sólo ganancias, espero no demorarme tanto en traducirlo completo, mientras tenga, lo voy subiendo.
En ese tiempo el caballo representaba todo, era medio de transporte, herramienta bélica y herramienta de trabajo, no se tenía solo un caballo sino que varios, y representaba más una forma de vida que un hobby. El caballo se usaba en la guerra, por lo que era imprescindible que estuviera bien arreglado. Un movimiento en falso, un resabio, una orden mal entendida o un error de juicio le podía costar la vida al jinete, al caballo y por ende problemas para el caballista.
Otra cosa es que para el príncipe siempre era el mismo caballo, eso no quiere decir que montaba siempre lo mismo, sino que era deber del caballo y del caballista adaptarse a la forma de montar del príncipe o del noble. Ningún caballo es igual al otro, al igual que ninguna persona es igual a otra, todos tienen distintos físicos, gustos, crianzas, temperamentos, características, velocidad, movimientos y bocas. Era el deber del caballista adaptar a los caballos para que el príncipe montara siempre el mismo, no del príncipe de adaptarse a los caballos. Ahí entraba la gineta en España.
Es un lujo de libro que espero lo disfruten. Este libro trata principalmente del amor y el arte por un oficio, no es difícil apasionarse, y vivir el caballo. Ahora nos transformaremos en caballeros mozos!!!.